ARCEDIANO, cuenta regresiva

  La querida barranca, orgullo ecológico de los tapatios, ve pasar sus últimos dias. En este articulo hacemos un tributo a lo que pronto será, un memorable recuerdo de salvajes exploraciones e incontables aventuras para el equipo de la NCA.

 

Esta reserva natural, refugio de miles de especies silvestres,  contrasta con la ruidosa y contaminada urbe que se sitúa en el valle superior.
 

A 600 metros debajo de la ciudad, corre vigoroso el río Lerma-Santiago, después de su fiel unión con el río Verde.
 
Descender a través de sus pendientes es una relajante aventura, entre exuberantes cantos de aves y zumbidos de las chicharras, sin mencionar los aromas que el fresco amanecer ofrece, después de una noche de tormentas, típicas del temporal veraniego.
 


Algunos cactus, de cientos de años de edad se distinguen del resto de la flora, contribuyendo a la gran bio-diversidad del lugar.

 
  Construcciones que datan de tiempos de la revolución han sido virtualmente tragadas por la vegetación, que reclama la posesión de estos terrenos.
 
  En la imagen inferior, exo-esqueleto abandonado por una chicharra que justo ahora debe estar cantando por la barranca en búsqueda de su pareja y alegrando nuestro recorrido.
 
  Durante el descenso, vemos varios canales de agua, destinados a alimentar turbinas de la CFE.
 

    El explorador Nachoscott se detiene en uno de los canales para exhibir su poder muscular.
 

 


Cerca de la profundidad máxima de la barranca, miles de arboles de mango permiten saborear sin limite sus frutos amarillos.
 
  Entre las copas de los arboles se distinguen estos nidos de aves, muy peculiares...
 

  Coloridos y atractivos frutos son manjares de chuparrosas e insectos . . .   Que qué es un chuparrosa?
 
Un ejemplar se puede ver en la foto inferior. . .      el del pico largo es el chuparrosa.
(Foto tomada previamente)
 

Conforme se sale de la densa vegetación, se pueden apreciar impresionantes paredes de las barrancas vecinas, retando al equipo de la NCA a continuar por allá, su aventurada exploración...
 
No sin antes cruzar el famoso puente del Arcediano, construido entre los años 1886 y 1888, conectando el norte del país con nuestra ciudad (no existía entonces carretera a Saltillo)...
 

Como sabemos todo esto? Con la ayuda de Don Pomposo, que cobra un peso a los que cruzan el puente, para el mantenimiento de . . . ambos,
 
…y con la información de este letrero en un muro, junto a la entrada.
 
Mientras Nachoscott y Gerardoug platican con Don Pomposo, yo veo pasar a algunos pobladores del puente a su casa…

 
Y de su casa al puente…
 
  Ya en el otro lado, se pueden disfrutar de sabrosisimas quesadillas hechas a mano, con salsas de chile y jitomate y la bebida de su preferencia…
 
Mmmmhhh!!
 





Dejemos un rato a nuestros exploradores dejándolos disfrutar de lo mejor de la vida y al igual que ellos hagamos una pausa. No se pierda proximamente….
    Arcediano II, cuenta regresiva. Como una cortesía de:

                                             

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